El Consejo Nacional para la Igualdad de Género (CNIG), en el marco de sus atribuciones constitucionales, brinda asistencia técnica al Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) en la Encuesta Nacional sobre Relaciones Familiares y Violencia de Género contra las Mujeres (ENVIGMU), con el propósito de garantizar la transversalización del enfoque de género en esta operación estadística.

Entre el 10 y el 14 de noviembre de 2025, en las provincias de Cañar, Chimborazo, Pastaza, Tungurahua y Santa Elena, se llevó a cabo una prueba piloto en áreas urbanas amanzanadas y zonas rurales dispersas. Su objetivo fue validar los instrumentos de recolección de información para asegurar que las preguntas fueran claras, pertinentes y capaces de capturar con precisión las experiencias de violencia vividas por las mujeres a lo largo de su vida y en los últimos doce meses.

La prueba piloto incorporó la aplicación íntegra del protocolo ético para el levantamiento de información, sustentado en los principios de seguridad, confidencialidad, rigor científico y generación de beneficios para las participantes. Asimismo, se implementó la guía de autocuidado y contención emocional dirigida a las encuestadoras, orientada a prevenir el desgaste emocional y el síndrome de burnout asociado al trabajo con temáticas sensibles. El CNIG desempeñó funciones de observación y verificación en campo, garantizando el cumplimiento del protocolo ético desde un enfoque de derechos y humanista, con especial atención a la protección de las informantes, la seguridad del personal encuestador y la integridad de los datos recolectados.

Esta acción conjunta refuerza el compromiso institucional de producir información estadística con enfoque de género que permita al Estado ecuatoriano contar con evidencia oportuna para la formulación, seguimiento y evaluación de políticas públicas orientadas a la prevención y erradicación de la violencia de género contra las mujeres.

El trabajo articulado entre el CNIG y el INEC representa un hito histórico en la medición de la violencia de género en el Ecuador, retomando y fortaleciendo la colaboración iniciada con la primera ENVIGMU en 2011 y aportando evidencia clave para el diseño de políticas públicas más efectivas.